El virus SARS-CoV-2 tiene la capacidad de mutar constantemente, independientemente de la variante las medidas de prevención recomendadas son las mismas. Lo que se conoce como mutación da lugar a la aparición de nuevas variantes.
Al representar un riesgo para la salud se clasifican en variantes de interés y de preocupación.
Actualmente existen cuatro variantes de preocupación:
- Alfa:Inicialmente se detectó en el Reino Unido.
- Beta:Se detectó inicialmente en Sudáfrica en diciembre de 2020.
- Gamma:Se identificó inicialmente en viajeros de Brasil, a principios de enero de 2021.
- Delta:Se identificó inicialmente en la India en diciembre de 2020, es mucho más transmisible que el virus original. Delta es peligrosa y continúa evolucionando o mutando.
Los síntomas varían desde aquellos que presentan síntomas leves hasta quienes se enferman gravemente. Los síntomas pueden aparecer de 2 a 14 días después de la exposición al virus.
Cualquier variante puede generar síntomas de leves a graves. Las personas con estos síntomas podrían tener Covid-19:
- + Fiebre o escalofríos
- + Tos
- + Dificultad para respirar (sentir que le falta el aire)
- + Fatiga
- + Dolores musculares y corporales
- + Dolor de cabeza
- + Pérdida reciente del olfato o el gusto
- + Dolor de garganta
- + Congestión nasal
- + Náuseas o vómitos
- + Diarrea
Esta lista no incluye todos los síntomas posibles. Los adultos mayores y las personas con afecciones subyacentes graves, como enfermedades cardiacas, pulmonares, diabetes y obesidad, parecen correr mayor riesgo de presentar complicaciones más graves a causa de la Covid-19.
Las variantes son un riesgo para la eficacia de las vacunas, la inmunidad innata y los sistemas de diagnóstico, prevenir es la mejor opción.
